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Registrar dominios con errores ortográficos comunes es una estrategia que puede parecer poco convencional, pero tiene varias ventajas que los emprendedores, dueños de negocios, profesionales del marketing digital y aquellos que desean proteger su marca deberían considerar. Aquí te detallo algunas de las razones más relevantes por las que este enfoque puede ser una opción válida para ciertos casos.
Una de las principales razones para registrar dominios con errores ortográficos comunes es capturar el tráfico de usuarios que escriben mal el nombre de tu dominio. Este fenómeno es muy frecuente en Internet, donde los usuarios, en su prisa o debido a la dificultad para recordar nombres largos o complejos, cometen errores tipográficos al escribir una dirección web. Si posees el dominio que corresponde a ese error tipográfico, puedes redirigir ese tráfico a tu sitio principal.
Por ejemplo, si tu dominio es supermercadoonline.com, podrías registrar variaciones como suermecadoonline.com o supermercadoline.com para captar a quienes cometieron esos errores al teclear. En lugar de perder visitantes que aterrizan en una página de error, puedes dirigirlos a la página correcta.
Registrar dominios con errores ortográficos comunes también puede ser parte de una estrategia de protección de la marca. En un entorno digital donde la competencia es feroz, no querrás que tus rivales (o personas malintencionadas) registren dominios similares al tuyo para desviar tráfico o, peor aún, dañar tu reputación. Si alguien registra una versión mal escrita de tu dominio, podría aprovecharse de la confusión de los usuarios, llevándolos a un sitio competidor o incluso a páginas con contenido no deseado, como estafas o malware. Al poseer esas variaciones, controlas mejor cómo se presenta tu marca en la red.
Por ejemplo, grandes compañías como Google, Amazon, o Facebook tienen un amplio portafolio de dominios similares o con errores tipográficos para evitar que terceros aprovechen los despistes de los usuarios.
Aunque no es una táctica que deba usarse de manera central en una estrategia de SEO, en ciertos contextos, tener dominios con errores ortográficos podría mejorar el posicionamiento en motores de búsqueda para esas búsquedas específicas. Si los usuarios tienden a buscar mal un término relacionado con tu marca, y tu dominio con el error está optimizado para capturar ese tráfico, podrías atraer a usuarios que de otra forma se perderían. Esto es más relevante si el error tipográfico es común en palabras clave importantes.
Por ejemplo, si tienes una tienda en línea que vende “tecnología” y muchas personas buscan “tecnoogía” debido a un error al escribir, un dominio registrado con esa variante y correctamente redireccionado podría capturar parte de ese tráfico accidental.
El typosquatting es una práctica en la que personas registran dominios con errores ortográficos de marcas populares para aprovechar el tráfico de usuarios que cometen errores al escribir. Estos sitios pueden ser utilizados para fines malintencionados, como la recolección de información personal, la instalación de malware o simplemente para redirigir a usuarios a sitios competidores. Al registrar los dominios con errores comunes relacionados con tu marca, puedes prevenir que otros los usen para typosquatting y proteger a tus usuarios.
Supón que tu dominio principal es libreríadigital.com, y alguien más registra liberíadigital.com o libreriadigital.co. Estos pequeños cambios pueden generar confusión, y si el propietario de ese dominio con el error lo usa para fines maliciosos, tu negocio podría verse afectado. Registrar estas variaciones por adelantado mitiga este riesgo.
Registrar dominios con errores tipográficos o versiones mal escritas de tu dominio principal te permite redirigir automáticamente a los usuarios a tu sitio web correcto, mejorando la experiencia del usuario y disminuyendo el número de visitas perdidas por errores de escritura. Es una solución sencilla y efectiva: cada vez que alguien cometa un error al escribir la URL, lo llevarás de manera directa a tu página principal sin que se den cuenta de su error.
Esta estrategia es especialmente útil si tu marca tiene un nombre difícil de recordar o escribir, como aquellos con múltiples caracteres o términos que podrían ser confusos. También puede funcionar si tu sitio opera en un ámbito internacional y algunos usuarios tienden a escribir mal tu nombre en otros idiomas o alfabetos.
Algunas palabras o nombres pueden sonar de manera similar a otras cuando se pronuncian. Registrar dominios que jueguen con estos errores fonéticos es otra manera de capturar tráfico. Las diferencias en la pronunciación entre regiones, o simplemente la forma en que algunas personas escuchan y entienden ciertos términos, puede llevar a confusiones a la hora de escribir.
Por ejemplo, si tu empresa se llama FotoFácil y algunas personas podrían pensar que se escribe como FottoFácil o PhotoFácil, registrar esos dominios te permite redirigir esas búsquedas hacia tu sitio web.
Registrar dominios con errores comunes también puede ser parte de una estrategia de marketing creativa, permitiendo crear campañas virales o únicas. Puedes registrar un dominio con un error ortográfico intencionado para atraer la atención de los usuarios, usándolo como una parte de una campaña publicitaria o de branding que juegue con ese error. Si bien esta técnica es más audaz, algunas marcas han utilizado este enfoque para diferenciarse y destacar en el mercado.
Imagina una campaña humorística en la que usas un error común a propósito para resaltar tu marca. Por ejemplo, podrías hacer una campaña donde se juega con el error de escribir tu dominio de manera incorrecta, señalando cómo, incluso si te equivocas, siempre llegarás al lugar correcto. Esto puede generar empatía y hacer que los usuarios recuerden tu marca de una manera positiva.
Además de los errores ortográficos, los errores de pronunciación de ciertas marcas o productos también pueden influir en la manera en que los usuarios escriben las direcciones web. Al registrar dominios que coincidan con cómo algunos usuarios podrían escribir mal una palabra basándose en su pronunciación, puedes capturar tráfico adicional y evitar que los usuarios se pierdan en su camino hacia tu sitio.
Por ejemplo, si tu sitio es chefdelicacies.com y muchos usuarios hispanohablantes escriben mal debido a que el inglés no es su idioma nativo, podrías registrar dominios como cheffdelicacies.com o shefdelicacies.com para aprovechar esas confusiones lingüísticas.
Registrar dominios con errores ortográficos comunes es una estrategia útil para proteger tu marca, captar tráfico adicional y mejorar la experiencia del usuario. Aunque no es una táctica esencial para todos los negocios, para aquellos que buscan prevenir typosquatting, mantener la coherencia de su presencia en línea y asegurar que sus clientes lleguen a su sitio, es una inversión pequeña con un gran potencial de retorno. Además, te permite tener mayor control sobre cómo y dónde aparece tu marca en la web, minimizando el riesgo de confusión entre los usuarios y asegurando que siempre puedan encontrar tu contenido, incluso si cometen un error al escribir tu dominio.